Beneficios:
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Hay un estiramiento intenso de todos los músculos posteriores del cuerpo que los estimula y revitaliza.
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Dota de flexibilidad a los músculos posteriores de las piernas y a la columna vertebral, irriga la médula espinal y aumenta la capacidad de resistencia del cuerpo.
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Favorece la acción cardiaca y perfecciona el sistema circulatorio; ejerce masaje sobre la región cordial (cardiaca).
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Se tonifica la región pelviana y se favorecen las glándulas sexuales.
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Ejerce una considerable presión sobre el abdomen, lo que representa un potente y beneficioso masaje sobre los órganos y vísceras del abdomen y una mejora en su funcionamiento.
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Se estimulan el hígado, el páncreas, los riñones y la vejiga. En las mujeres se favorecen los ovarios y en los hombres, la próstata.
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Equilibra el funcionamiento de las glándulas suprarrenales y reactiva la energía a los distintos plexos.
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Seda el sistema nervioso, induce a la relajación profunda, favorece la unidireccionalidad de la mente. .
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Previene o ayuda a combatir la ciática, el lumbago, la lordosis, la dispepsia (molestia digestiva), algunas formas de impotencia, la indigestión y la hipertrofia renal.
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Es muy eficaz para combatir la pereza intestinal y prevenir la gastritis, así como las hemorroides y varices.
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Aumento de la actividad cerebral.
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Corrige desviaciones vertebrales (sobretodo lordosis lumbar).
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Estéticamente: reduce celulitis del vientre y la cadera; elongación de las arrugas.
Efectos terapéuticos y preventivos: